El término Peeling viene del inglés “Pelar”, y en
definitiva, un peeling químico consiste en la aplicación sobre la piel de una o
varias sustancias químicas (fundamentalmente ácidos) que producen una
destrucción controlada de la epidermis (o incluso de parte de la dermis)
originando una exfoliación (un “pelado”) por aceleración del recambio celular.
Todo esto originará una regeneración epidérmica y una reparación de la dermis,
con formación de nuevo colágeno. En definitiva, las capas celulares serán
sustituidas por otras de mejor calidad, con menos manchas y mejor textura.
Aunque el término peeling es relativamente reciente, ya
desde la antigüedad se conocían y utilizaban técnicas similares. ¿Quién no ha
oído hablar de los famosos baños de leche de Cleopatra? Pues la razón de estos
famosos baños era que la leche fermentada contenía un alto nivel de ácido
láctico capaz de suavizar la piel.
Muchas personas buscan un tratamiento simple para mejorar la
piel de su cara sin necesidad de técnicas quirúrgicas, y para ellas, los
peelings químicos pueden ser una gran elección.
Las sustancias que pueden aplicarse son de muy diverso
índole, y según cuáles utilicemos, a qué concentración, cuántas capas de éstas
se apliquen, durante cuánto tiempo las dejemos aplicadas, y también según el
número de sesiones que se realicen, el efecto será diferente.
Entre los posibles beneficios están el aumento del colágeno
(y la elastina) que mejora las arrugas, la atenuación de manchas (y
homogeneización en el tono de la piel), el control sobre la grasa y bacterias
en las pieles acneicas, o la mejoría de cicatrices deprimidas (cicatrices de
acné fundamentalmente), entre otras, y aunque puede usarse para tratar los
signos del envejecimiento (fisiológico o relacionado con la exposición solar),
de forma general se obtendrá un mejor aspecto de la piel tratada, y puede
simplemente emplearse como un "medio para mantener una piel sana, tersa, libre
de impurezas y luminosa”.
Entre las sustancias más utilizadas en el peeling se
encuentran los alfahidroxiácidos (AHA), que son sustancias ácidas. Entre
éstas se encuentran el ácido glicólico (el más famoso, y que proviene de la
caña de azúcar), el ácido láctico (de la leche agria), el ácido málico (de
manzanas maduras), tartárico (de uvas), cítrico (de frutas maduras) o mandélico
(de almendras). Otras sustancias muy utilizadas son el fenol, el resorcinol, el ácido retinoico (derivado de la vitamina A), ácido salicíclico, tricloroacético...
El papel del dermatólogo es fundamental a la hora de elegir
el tipo de peeling que se debe efectuar en función de la clase de piel del
paciente y de los resultados que se pretenda obtener.
Se diferencian 3 tipos diferentes de peeling según la
profundidad de su efecto:
-Peelings Superficiales:
Afectan al estrato córneo, la
epidermis y la dermis papilar superficial. Éstos están orientados al
tratamiento del fotoenvejecimiento y con ellos obtendremos una piel con mejor
aspecto, más luminosa, con poros más cerrados, con mejoría en las arrugas finas
y los problemas leves de acné. También son de utilidad en el tratamiento de las
manchas, siempre que se utilicen junto a cremas despigmentantes. La gran
ventaja de estos peelings es que permiten al paciente retomar su vida normal
inmediatamente después de someterse al tratamiento, por lo que hoy en día son
los más utilizados. Para obtener los mejores resultados (más intensos y
duraderos), en muchos casos se recomienda efectuar varios peelings
(distanciando unos de otros entre dos y seis semanas), dependiendo de la
profundidad de los mismos y del problema cutáneo que queramos resolver. En otros
casos, simplemente se utilizan para situar a la piel en mejores condiciones
para recibir cualquier tipo de tratamiento dermatológico. Los peelings
superficiales se realizan fundamentalmente con alfa-hidroxiácidos (ácido
glicólico), ácido tricloroacético (10-15%) o la solución de Jessner.
-Peelings medios:
Afectan al estrato córneo, epidermis,
dermis papilar y dermis reticular superficial. Mejoran notablemente la textura
y color de la piel y son muy eficaces contra el fotoenvejecimiento (actúan
sobre arrugas finas y de profundidad media) pero no son de utilidad en casos de
acné. Acompañados de cremas despigmentantes son muy eficaces frente a las
manchas. También puede emplearse como paso previo o complemento de muchos
tratamientos como la microdermoabrasión, lifting o rellenos. El mayor inconveniente de esta
técnica es que el paciente por lo general precisará de unos días de
convalescencia, en que probablemente no podrá atender sus compromisos
sociolaborales. Valorando riesgo y eficacia son los más útiles, pero para muchas
personas es difícil encontrar el momento en que puedan quedar unos días
“inactivos”. Para los peelings medios se utilizan habitualmente la solución de
ácido tricloroacético del 35% al 50% o la solución del fenol al 88%.
-Peelings profundos:
Llegan hasta dermis reticular media.
Con resultados espectaculares, consiguen actuar sobre las arrugas
superficiales, medias y profundas, eliminar manchas solares y queratosis.
Asimismo, produce la retracción de la piel, lo que ayuda a mejorar los problemas
de flaccidez, aunque hay que tener en cuenta los requerimientos de la técnica
(se requiere que el paciente esté anestesiado) y la recuperación, que puede
durar varias semanas, o incluso meses, pudiendo existir riesgo de manchas
(habitualmente blanquecinas) o cicatrices. Suelen usarse en personas mayores
con envejecimiento cutáneo severo y arrugas profundas, y dispuestos a estas
incomodidades y posibles secuelas. Por todo ellos, son hoy en día los menos
utilizados. Entre ellos, más empleado es la solución de Baker-Gordon, a base de
fenol a altas concentraciones.
Preguntas y respuestas sobre los peelings químicos:
¿Quién es en principio candidato a ser tratado mediante un
peeling químico?
Las principales indicaciones las encontramos en pacientes
con signos de envejecimiento facial (arrugas, manchas, queratosis), en pacientes con poros
dilatados, con acné, cicatrices, estrías…
¿Es cierto que los peelings químicos pueden actuar
protegiéndonos frente al cáncer de piel?
Sí. Así es, y es debido a que estimulan la proteína p53, que
tiene una función defensiva inmunológica sobre las alteraciones que produce la
exposición a las radiaciones ultravioletas del sol o de la cabina de rayos UVA.
La población general ignora que cada día que pasamos en la playa o en el campo favorece el
desarrollo de cáncer de piel debido a la aparición de mutaciones en las células
epidérmicas inducidas por las radiaciones UV, pero la proteina p53 destruye
este desarrollo de cáncer, y por tanto, tiene un papel protector sumamente
importante.
¿Desde qué edad puede realizarse un peeling un paciente?
Para la aplicación de esta técnica lo importante no es la
edad del paciente sino el estado de la piel. De hecho, en muchos adolescentes,
por ejemplo, puede ser la mejor solución en determinados casos de acné o
determinadas manchas.
¿Todas las personas consiguen los mismos resultados tras un
peeling?
No, ya que según el estado de la piel se conseguirán
diferentes grados de mejoría. En cualquier caso -y por muy estropeada que esté
la piel- siempre se conseguirán efectos visibles.
¿Quién no debería realizarse (al menos en principio) un
peeling químico?: Contraindicaciones:
-Mujeres embarazadas o que puedan estarlo así como aquellas
que estén realizando lactancia materna.
-Quienes hayan estado tomando isotretinoina en los 6 meses
previos.
-Intervenciones quirúrgicas en las zonas a tratar en los 4
meses previos.
-Fototipos de piel oscuros (tipos IV a VI en la escala de
Fitzpatrick).
-Exposición solar continua, intensa o frecuente en las semanas
previas o el día del peeling.
¿De qué deberá informar a su dermatólogo antes de realizarse
un peeling?
-De cualquiera de las condiciones previamente comentadas que
podrían constituir una contraindicación para el peeling químico.
-Sobre el uso de cremas “de belleza” en su domicilio,
especificándolas, o bien de la realización previa de peelings (y sus
resultados), implantes, infiltración de toxina botulínica, maquillaje
permanente o cirugía recientemente.
-Sobre cualquier enfermedad o proceso intercurrente que
padezca el paciente, y los fármacos que se encuentre tomando en las semanas
previas y en el momento del peeling.
-Acerca de si ha sufrido un herpes en las dos semanas
previas, o si presenta historia de herpes de repetición (ya que el peeling
puede provocar una reactivación del mismo en caso de que no se prevenga).
-Sobre si tiene predisposición a mala cicatrización.
¿Qué medidas generales deberá adoptar antes de realizarse
peeling químico?
Aunque su dermatólogo deberá explicarle unas medidas
concretas, de forma general:
-Deberá evitar el uso de rayos UVA o exposiciones extensas
al sol en las semanas previas al peeling.
-Es recomendable evitar en la semana previa a la realización
del peeling la realización de procedimientos que puedan irritar la piel como
son limpiezas de cutis, uso de esponjas abrasivas o depilaciones.
-Probablemente se le recomiende el uso de cosméticos
específicos (probablemente a base de retinoides o ácidos) para “prepara la
piel” para el peeling, con el objeto de conseguir la mejor reacción posible al
mismo.
¿Cuál es la mejor época para realizarse un peeling?
Siempre evitando el verano, ya que tras someterse a esta
técnica la piel estará más sensible y no está recomendada la exposición al sol.
¿Cuánto tiempo dura la aplicación del peeling?
Dependerá de la extensión tratada y de la sustancia
empleada, variando por lo general cada sesión entre 10 minutos y 2 horas. Lo
más habitual es una duración de 20-40 minutos.
¿Cada cuánto tiempo debe de hacerse un peeling?
La periodicidad del peeling también dependerá del objetivo
del tratamiento así como del tipo de peeling realizado, y es algo que deberá
comentar con su dermatólogo. Existen por ejemplo peelings para aportar
luminosidad al rostro que pueden llegar a realizarse con periodicidad semanal o
quincenal. En cambio, cuando la intervención en la piel es profunda, las
sesiones se espacian más en el tiempo y el tratamiento completo se repite por
ejemplo una vez al año. Si el peeling es muy profundo no suele repetirse en
años.
¿En qúe consistirá de forma general el procedimiento del
peeling químico en la consulta?
En la consulta, el pre-peeling inmediato consistirá en una
profunda limpieza y desengrasado de cutis. Posteriormente se procederá a
proteger las zonas más sensibles como cremas “barrera”, y comenzará la
aplicación de las sustancias del peeling.
El post-peeling inmediato, según el caso, podría incluir una
última capa de una sustancia (habitualmente un retinoide) como “sellado” del
peeling, o bien un neutralizado de las sustancias aplicadas.
¿Cuál es la sensación que se nota al hacerse un peeling?
¿Qué cambios experimentará de forma inmediata mi piel?
Durante el procedimiento se puede notar una sensación
de picor y calor, que por lo general será leve, y habitualmente más intensa cuanto más profundo sea
el peeling, pero también según qué sustancias se utilicen (por ejemplo, el
fenol tiene cierto efecto anestésico, por lo cual no suele originar grandes molestias) y por supuesto, según la piel de cada
paciente. En cualquier caso, todas estas sensaciones desaparecerán por lo
general tras la aplicación del neutralizador (si lo precisan) o en un corto
espacio de tiempo. Al finalizar el peeling, según el caso, la piel puede
encontrarse brillante, enrojecida, blanquecina, amarillenta… o incluso con
discreta inflamación y/o costras, pudiendo notar en las horas o días
posteriores la piel algo “tensa”.
¿Qué debe de hacerse después del peeling?
Aunque su dermatólogo le deberá entregar por escrito las
instrucciones con los cuidados post-peeling a realizar, después del tratamiento
la higiene es inexcusable, es imprescindible la protección solar y evitar la
exposición directa al sol. Cada paciente contará con un tratamiento
personalizado, y se deberán seguir los consejos de su dermatólogo para evitar
infecciones bacterianas, herpes, cicatrices, alteraciones de la pigmentación y
alergias. En caso de que quiera maquillarse es por lo general recomendable
esperar al día siguiente al peeling, y no aplicar maquillaje (o bien aplicar
“lo mínimo posible”) mientras se produce el “pelado”. Tampoco se debe exponer
la piel tratada a calor, saunas, o realizar ejercicios físicos hasta la semana
siguiente a la realización del peeling.
¿Se puede hacer vida normal después de un peeling?
En los peelings superficiales el paciente presenta una
reacción similar a una quemadura solar leve cuyo efecto desaparece en 3-5 días (o
incluso en horas, si es muy superficial). En el caso del peeling medio la
reacción por lo general dura entre 7 y 10 días.
Tras el tratamiento el paciente presentará un enrojecimiento
y descamación de la piel, que serán más intensos y duraderos cuanto más profundo sea el
peeling.
¿Cuáles son los efectos que cabe esperar después de un
peeling?
La mejoría de la piel se nota después en 1 ó 2 días con los
peelings más suaves hasta 1 mes con los más intensos, aunque el enrojecimiento
cutáneo con los peelings profundos puede durar hasta 6 meses.
¿Cuáles son las posibles complicaciones del peeling?
Son excepcionales (y aún más si se realizan por un dermatólogo experimentado, si se siguen los consejos pre y
post-peeling, y cuando el peeling realizado no es profundo), pero pueden verse
en casos muy raros la reactivación de un herpes latente, infecciones cutáneas,
enrojecimiento persistente, eccemas, eritema rayado en los casos de peeling con
resorcinol, quemaduras, hiperpigmentación postinflamatoria, aclaramiento del
color de la piel, cicatrices, erupciones acneiformes, descamación o reacciones
alérgicas a determinados componentes del peeling, como es el resorcinol.
¿Cuánto duran los resultados del peeling?
Por lo general, a mayor profundidad del peeling y mayor
número de sesiones, mayor duración de los resultados, sin olvidar que el
proceso de envejecimiento seguirá su curso.
¿Se pueden asociar los peelings con otros tratamientos?
No sólo se pueden asociar, sino que potencian los efectos de
técnicas tales como el láser o la infiltración de toxina botulínica.
En definitiva, a día de hoy los peelings químicos que suelen
realizarse en la consulta del dermatólogo (peelings superficiales y/o medios)
son muy seguros, con efectos claramente beneficiosos (e inmediatos) en la piel,
muchas posibles indicaciones, y mínimas posibilidades de problemas asociados a
su uso. Seriándolos, su efecto será más intenso y duradero, y son combinables
con muchos otros tratamientos.
Tenga en cuenta que la información contenida en esta página es una información general, y en ningún caso puede, ni pretende, sustituir la información proporcionada
individualmente por su dermatólogo.